Encuentro Federal
En total se realizaron 30 simposios, 10 mesas redondas y 2 conversatorios, donde los investigadores e investigadoras analizaron el estado de avance de las investigaciones en todas las regiones de nuestro país y áreas limítrofes.
En el marco del congreso, se realizó el Simposio Tawantinsuyu, donde especialistas en la temática incaica debatieron acerca de los últimos descubrimientos en la materia. Allí, el director de Patrimonio de la Mendoza, Horacio Chiavazza, presentó su ponencia “Gestión, Patrimonio e Investigación en el Sur del Qhapaq Ñan (Mendoza)”, exponiendo los principios y lineamientos que adopta el Gobierno de Mendoza y el Ministerio de Cultura y Turismo en este tema.
Chiavazza expuso ante los máximos especialistas en la materia el estado de situación en torno a las políticas de gestión y acciones concretas de conservación e intervenciones que se están llevando a cabo en pos del conocimiento, manejo y conservación de los sitios Qhpaq ñan (Patrimonio de la Humanidad) existentes en la provincia de Mendoza. También se habló acerca del proceso de conservación preventiva y articulación de criterios de conservación y objetivos de uso público llevados a cabo en el sitio Ranchillos, sobre todo en lo inherente a mitigar los efectos del cambio climático sobre el patrimonio arquitectónico del sitio.
Además, se complementó en mesas regionales, con presentaciones por parte de investigadores locales, estudios sobre las características e interpretación del funcionamiento del sitio durante tiempos incaicos a cargo de Cristina Prieto Olavarría y Sebastián Silvestri, ambos investigadores del Conicet y con aval de la DPPCyM.
Trabajo para restituir la Qhapa qocha
Otro tema destacado que se tocó durante el simposio fue la presentación de plan de gestión y avances en torno al proceso de cogestión y restitución de la Qhapa qocha (cuerpo momificado) del Aconcagua al pie de dicho cerro. Al respecto, Chiavazza destacó: “Los criterios de gobernanza impulsados desde la Dirección de Patrimonio y la búsqueda de consensos entre comunidades originarias de montaña, instituciones científicas, universitarias y organizaciones de gobierno que se lideran desde la Dirección de Patrimonio fueron considerados promisorios y como un ejemplo a seguir en otras provincias, dado que suponen diseños estratégicos de gestión inéditos y requieren la atención de protagonismos emergentes dentro de sistemas de gestión participativa, donde cuestiones inherentes tanto al pensamiento científico como valores ancestrales participan de la construcción de sistemas de conocimiento en los cuales se asientan nuevas miradas sobre el patrimonio cultural”.
Además, sobre este patrimonio, valoró: “No es entendido solo como objeto, sino como una constelación de sentido, donde objetos, valores y prácticas conforman un conglomerado de aspectos dinámicos que no pueden soslayarse y son parte fundante de la declaratoria de Qhapaq Ñan como patrimonio mundial”. Y finalizó: “Restituir valores al territorio, garantizando la conservación material respondería al modelo impulsado por Patrimonio que indica que es necesario investigar para conocer, dado que así se conserva mejor y puede conocerse más y, al hacerlo, incorporar a la sociedad en los procesos de difusión y gestión participativa en la conservación”, concluyó Horacio Chiavazza.
En las reflexiones finales del simposio, se rescató la experiencia mendocina como desafiante y novedosa, e incluso por algunos participantes como un modelo a seguir para avanzar en procesos de democratización y atención de demandas sociales en torno a la producción y gestión del conocimiento de los bienes patrimoniales.
