HISTORIAS
El mendocino Juan Cruz Agüero (23 años) tiene su presente en el Club Lleida Esportiu en Cataluña. Está jugando en la Segunda división, en el grupo 3, del fútbol de España. Por encima tiene a la Primera Federación (Primera B) y la Primera división que es en donde están Barcelona, Real Madrid, Atlético de Madrid entre los más poderosos.
La historia de Juan Cruz, nacido el 27 de mayo de 1999, con primera residencia en el barrio Canciller de Maipú, está salpicada de interacciones con grandes figuras mundiales. Porque estuvo acariciando la cresta de la ola y recibió mimos futbolísticos de gente como Cholo Simeone, Beccacece o Sampaoli. Tuvo su momento de gloria o llegó muy cerca. Según cómo se lo mire. 
De muy pequeño a España
Emigró a España (a Reus, Cataluña) con sus padres Gustavo Agüero y Monserrat Núñez, cuando sólo tenía 2 años, en 2001. Su familia decidió irse de Mendoza, en búsqueda de una vida mejor y el pequeño Juan Cruz era el menor de tres hermanos (Ignacio Jesús -14- y Lucio -4-).
Fue creciendo con la pelota de fútbol en sus pies jugando en las infantiles de su barrio. A los 10 años lo incorporaron al Barcelona. Los entrenadores vieron el talento del chico que viajaba los 100 kilómetros, que separan Reus del campo de entrenamientos de La Masía, en un taxi que el club le ponía 4 veces por semana. 
Varias veces lo llevaron a ver las prácticas de los mayores y miraba con asombro a Lionel Messi, Piqué, Iniesta y las figuras que brillaban en ese Barcelona repleto de estrellas.
Pero ocurrió algo inesperado. A los 13 años Barcelona no le renovó la afiliación. Recibió propuestas de Valencia y Atlético de Madrid que implicaban abandonar su ciudad. Debía dejar la zona de confort con su familia y partir a una vida en alojamientos compartidos con otros chicos y estar al cuidado de gente amable pero extraña. Optó por Madrid y allí fue el niño, al cuidado del Atlético. 
El chico se movía como enganche o delantero. De buena pegada y puntería para los tiros libres, fue pasando por distintas categorías. La doble nacionalidad (por sus abuelos) le permitió que el seleccionado de España lo convocara para jugar en la sub 14, 15 y 16 en algunos torneos europeos. Con el Atlético de Madrid jugó la Copa Europea en los juveniles.
Su momento de crecimiento
En 2018 Agüero completó la triple corona de campeonatos con el juvenil de Atlético de Madrid: la Liga, la Copa de Campeones y la Copa del Rey. Diego Simeone lo veía a menudo y lo llevó a entrenar con la primera división y hasta fue al banco de suplentes en algunos amistosos.
También le llegó la alerta al cuerpo técnico del sub 20 comandado por Sebastián Beccacece, que lo convocó a la Selección Argentina de esa categoría. El sub 20 iba a acompañar al seleccionado mayor en dos amistosos el 23 de marzo en Manchester (Inglaterra) frente a Italia y el 27 en España, ante el combinado local. 
A esa concentración fue llamado Juan Cruz que se deleitó enfrentando en las prácticas al seleccionado mayor nada menos que con Messi incluido.
Los juveniles jugaron un amistoso frente a Inglaterra y el mendocino compartió el banco de suplentes con Julián Alvarez (que sería campeón Mundial en Qatar 2022) y con Thiago Almada. Finalmente, Beccacece no le dio muchas oportunidades a Juan Cruz, que volvió a alternar las prácticas con la primera de Simeone y los juveniles del Atlético de Madrid. 
Partió a Villarreal
Al inicio de la temporada, en agosto de 2018 se despedía de Madrid para ir a jugar a Villarreal C (segunda división) y luego en el Villarreal B (Primera B) en donde permaneció hasta mediados de 2021. Nunca lo promovieron al Submarino Amarillo de la máxima Liga Española. 
Por eso recibió la oferta de San Fernando Club Deportivo Isleño, de esa ciudad de Andalucía, para jugar en la Segunda categoría. Estuvo en la temporada 2021-2022 en ese club y el año pasado recibió el llamado de Lleida Esportiu de Cataluña que queda más cerca de su casa paterna.
Su valoración actual es de 200 mil euros, y ha jugado en 28 de los 29 partidos de la actual temporada donde Lleida está en mitad de tabla y no peligra el descenso, pero tampoco tendrá la ocasión de ascender. 
El maipucino, que partió dando sus primeros pasos rumbo a Europa, vive del fútbol desde la adolescencia. Se dio el gusto de tener a Cholo Simeone como DT, de vestirse con la ropa de la selección argentina y de tener a Messi frente a frente en varias prácticas y al lado del ídolo para las fotos.
¿Su momento de gloria ya pasó o tendrá su revancha? Eso lo dirá el tiempo. Juan Cruz juega al fútbol, es profesional y sólo tiene 23 años. Por lo menos la vida le sonríe.
