SOMBRÍO PANORAMA
Bodegas de Argentina expresó su profunda preocupación por la caída en las exportaciones de vino, lo que lleva al sector a una situación "crítica", que se traduce en "menor nivel de actividad" de las empresas y afecta a toda la cadena de valor.
Ante este panorama adverso, las bodegas de Mendoza no pueden ser ajenas y también han comenzado a padecer de este problema. La actividad económica madre en la provincia ha comenzado a sentir los coletazos, primero con la baja en el consumo de la bebida nacional, y luego con esta caída de la exportaciones.
Durante el primer semestre, según datos del INV, las exportaciones cayeron 26,8% los vinos fraccionados y 44.5% los vinos a granel, lo que totaliza una disminución del 31,7% en el volumen total de vinos despachados al exterior, recordó la entidad.
En facturación representan una disminución de 20% para los fraccionados, 32,3% para los graneles y 21% para la totalidad de las exportaciones de vinos, agregó.
Según la entidad, las caídas de volumen y facturación citadas se deben fundamentalmente a la "falta de competitividad del tipo de cambio, frente a los incrementos de costos que han tenido los componentes de los productos".
Las uvas, más del 300% más caras que en 2022
A ello se suma la situación particular de la industria donde, una cosecha baja en volumen, disparó los precios de las uvas a valores que superan el 200% y el 300% mayores a los de la cosecha 2022.
"Costos que suben a tasas de tres dígitos y un tipo de cambio cuya variación, si bien se aceleró en el último tiempo, siempre fue menor que aquellos, generan un escenario de caída de rentabilidad generalizada de los productos", explica.
Por otra parte, consigna que el Programa de Incentivo a las Exportaciones (PIE) "no resultó de fácil acceso a las bodegas" porque las condiciones de ingreso "no generaron incentivo alguno para exportar en mejores condiciones cambiarias".
Tras recordar que el sector viene reclamando esta falta de competitividad en los últimos dos años, sostuvo que la dificultad para las empresas de sostener sus productos en los mercados de destino y el resultado es "menores exportaciones".
A ello se suman las restricciones de transferencias al exterior, ya sea para para importar insumos o pagar servicios, y el incumplimiento de pago en estos conceptos genera falta de incentivos comerciales en los puntos de ventas.
Ante la situación, Bodegas de Argentina solicitó una "revisión y actualización" del PIE, la eliminación de la obligatoriedad de acceso a precios justos, el incremento del tipo de cambio del PIE y la extensión de la ventana de tiempo para las operaciones.
