Enviado especial
La obertura estuvo a cargo del mago Jean Paul Olhaberry. El mago ejecutó una serie de acciones que incluyeron sorpresivos cambios de lugar, un impactante número de escapismo y la incorporación de los animadores en el escenario. El momento más memorable fue con un juego de cartas en vivo, con sobre distribuidos entre la Quinta. La sorpresa fue tal que el Monstruo pidió la Gaviota de Plata, la que fue entregada.
Pasadas las 22.00 horas, vino la presentación de María Becerra. La “Nena de Argentina” se presentó siendo además jurado. Su show fue articulado para la ocasión en base a las canciones más populares en el país como Automático, Miénteme (el hit junto a Tini), Wow Wow, Perreo furioso, entre otras. En escena, la oriunda de Quilmes desplegó un show con bailarines y banda en vivo, prescindiendo de depender totalmente de pistas. 
María Becerra se tomó un momento para leer una carta en que se explayó sobre su experiencia visitando los cerros devastados por la tragedia de los incendios, junto al resto del jurado. Fue emotivo que la cantante se mostró al borde del llanto y pidió un aplauso para los voluntarios, bomberos y personal médico. Un momento rematado con la balada Desafiando al destino, en que cantó con una chamuscado bandera chilena entre sus manos. 
Luego llegó el humor y la interpretación de los ganadores de las Competencias Folklóricas e Internacional.
El cierre estuvo a cargo de Trueno, vestido con camiseta y pantalones de cuero negro, el cantante de 21 años salió a entregar toda su energía con Atrevido, seguida de su colaboración con el productor Bizarrap, en su sesión 6. La emoción del público aumentó con las primeras notas de Mamichula, tema grabado junto a su exnovia, Nikki Nicole, en 2020. 
Para esta interpretación, su banda cambió las guitarras eléctricas por las acústicas. La despedida, al ritmo de Dance Crip, fue inesperada: Trueno se quitó la camiseta y bailó en solitario. 
Así el Festival de Viña del Mar, con una noche llena de sensaciones puso fin a la edición 63 del certamen. Una jornada que cierra un ciclo de cuatro años que lideraron TVN y Canal 13, con la producción de Bizarro, con un trabajo en conjunto que incorporó varios hitos a la historia del certamen. Esta vez, por primera vez en su historia, con un foco solidario. Los grandes nombres que llegaron hasta la Quinta Vergara, fueron un denominador común en los últimos años. Esta última edición dejó escrito en la memoria del certamen que el show de Andrea Bocelli fue uno de los más grandes en la historia del festival. El tenor trajo un despliegue artístico nunca antes visto sobre este escenario y que se llevó la atención absoluta del público y los millones de televidentes tanto en Chile como el exterior.
