Práctica que crece

Transportaban carne en dudoso estado y fueron detenidos

Tres hombres fueron arrestados en la localidad de Montecaseros, San Martín, al transportar carne de dudosa procedencia. Este caso pone de relieve una preocupante práctica que va en aumento.

En un operativo llevado a cabo por personal de la Policía de Seguridad Rural en la intersección de las calles Bosch y El Ñango, en Montecaseros del departamento San Martín, tres hombres fueron detenidos tras ser encontrados transportando carne en condiciones sospechosas. La acción de las autoridades pone de manifiesto una práctica que se ha vuelto cada vez más frecuente y preocupante.

La carga fue incautada

Durante la patrulla por la zona, los agentes avistaron una camioneta marca CHEVROLET, modelo C-10, de color verde, con el dominio WZJ-722, ocupada por tres individuos. Al inspeccionar visualmente la caja del vehículo, se descubrieron dos bolsas de arpillera que contenían aproximadamente 50 kilos de carne vacuna congelada, además de una balanza y dos cuchillos tipo carnicero.

El vehículo en el que trasladaban la carne

Durante los interrogatorios, uno de los detenidos afirmó haber faenado la carne en su domicilio para consumo personal y venta, pero no pudo proporcionar una justificación válida para su procedencia. Los tres individuos fueron trasladados a la Comisaría 55°, donde se llevó a cabo el decomiso de la carne y el secuestro del vehículo por parte del personal de la Policía Vial.

Así transportaban la carne vacuna

Este incidente pone en evidencia una preocupante práctica que se ha vuelto más común en la región. El transporte y comercialización de carne de dudosa procedencia representa un riesgo para la salud pública, ya que no se puede garantizar la calidad e inocuidad de estos productos. Las autoridades locales y los organismos de control intensifican los esfuerzos para combatir esta problemática, asegurando la trazabilidad y el cumplimiento de las normas sanitarias en la cadena de producción y distribución de alimentos. La detección y persecución de estas prácticas ilegales es fundamental para proteger a los consumidores y preservar la integridad del sector alimentario.