Un hombre de 54 fue una víctima más del monóxido de carbono, que en el invierno azota como un asesino silencioso. La víctima fue identificada como Carlos Ochoa, y murió en su habitación.
El hecho ocurrió cerca de las 18 horas de este martes, en una vivienda particular ubicada en calle Guisasola, en el departamento de Tunuyán. Allí arribó personal policial, tras recibir un llamado a la línea de emergencias, que alertaba sobre un hombre fallecido.
Al llegar al lugar, entrevistaron a la hermana de la víctima y declaró que momentos antes, su madre había ingresado a la habitación donde se encontraba tendido en la cama Ochoa, al parecer ya sin signos vitales. En el lugar se hallaba una estufa salamandra a gas, con abundante calor.
Asimismo, el interno 04 del SEC a cargo del Dr. Gotagoyena, constató en el lugar el deceso del hombre, a quien le diagnosticaron intoxicación por monóxido de carbono.