Justicia
Se trata de Juan Abel Rivas (39), quien fue sentenciado ayer por el delito de “homicidio agravado por el uso de arma de fuego”, en perjuicio de Rodrigo “El Chuli” Ortiz (40).
Voceros judiciales informaron que el veredicto del juicio oral fue dado a conocer por el juez Diego Lusverti, quien además de los 18 años de cárcel declaró reincidente a Rivas, en una audiencia realizada en el Polo Judicial Penal de la ciudad de Mendoza.
El hecho ocurrió el 4 de septiembre de 2021 en la calle padre Llorens, frente a la Manzana 3 del barrio Sargento Cabral, de la localidad antes mencionada, a unos ocho kilómetros de la capital provincial.
A base de las pericias en aquel momento surgió que aquella madrugada se realizaba una fiesta de cumpleaños en una vivienda, cuando comenzó un intercambio de palabras entre dos grupos, por lo que debió intervenir, Ortiz quien intentó sacarlos del lugar.
Una vez en la vereda, los individuos involucrados continuaban con sus diferencias y se originó una pelea entre ellos en el cual Ortiz quiso detener la riña y en ese momento recibió el primer balazo.
Uno de los participantes de la pelea, un menor de edad, llamó por teléfono a Rivas, quien llegó a bordo de un automóvil Ford Fiesta Kinetic, descendió del vehículo con un arma de fuego en cada mano y sin más baleó a Ortiz, quien cayó herido al piso.
Un llamado a la línea de emergencia 911 alertó a las autoridades sobre detonaciones de arma de fuego en un sector del barrio, por lo que enviaron un móvil policial y dieron cuenta que al menos tres personas heridas fueron trasladadas en vehículos particulares a hospitales de la zona.
En este contexto, un automóvil Volkswagen Gol dejó a Ortiz en la guardia del hospital Lagomaggiore donde constataron su muerte a causa de 13 heridas de balas en distintas partes del cuerpo.
Luego, al mismo lugar y en otro vehículo llegó a la guardia otro hombre (Rivas) quien fue asistido por los médicos por una herida de arma de fuego en la pierna izquierda con orificio de entrada sin salida.
La Policía dio cuenta que este último vehículo, al mando del hijo del herido, un adolescente de 15 años, tenía pedido de secuestro por hurto simple del 2006, por lo que el automóvil fue remolcado hasta una comisaria de la zona.
En tanto, familiares de Ortiz llegaron al hospital para saber su estado, por lo que un pelotón de Infantería se apostó en el lugar con el objetivo de prevenir algún tipo de reacción y garantizar el normal desempeño del hospital.
