Argentina
Las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) se celebrarán mañana y si bien formalmente la instancia está pensada para la selección de candidatos dentro de cada una de las coaliciones electorales de los 23 distritos del país, los resultados de los comicios marcarán una medida bastante aproximada de cómo quedaría conformado el Congreso nacional a partir del próximo 10 de diciembre, tras la renovación de 127 bancas de la Cámara de Diputados y 24 del Senado.
Pese a que previsiblemente su performance electoral se vea afectada por el escándalo del "Olivos-gate" y por los problemas irresueltos de la economía, el Frente de Todos buscará hacer una buena elección en todo el país que le permita quedar cerca del quórum propio en la Cámara de Diputados.
Juntos por el Cambio, la principal alianza opositora, intentará mantener su actual volumen y convertirse en dique de contención de las aspiraciones oficialistas para hegemonizar el debate parlamentario a partir de mayorías automáticas.
Más de la mitad de las bancas para Diputados se definirán en los cuatro distritos más grandes del país a nivel demográfico, por lo que en esas provincias radicará el mayor atractivo e interés de la jornada electoral: Buenos Aires (35 diputados), Ciudad de Buenos Aires (13 diputados), Córdoba (9 diputados) y Santa Fe (9 diputados).
Juntos por el Cambio celebrará internas en los cuatro distritos, mientras que el Frente de Todos arribó a listas unificadas en todos ellos a excepción de Santa Fe, donde competirá el armado del gobernador Omar Perotti contra el del ex ministro kirchnerista Agustín Rossi, precandidato a senador nacional.
Juntos por el Cambio pondrá en juego 60 de sus 115 bancas en Diputados (52%), mientras que el Frente de Todos arriesgará 51 de sus 119 (43%).
El oficialismo está a 10 bancas de lograr la mayoría propia, pero el objetivo es altamente improbable, y requeriría de un desempeño similar o mejor que el del 2019, cuando no estaba presente el factor desgaste de la gestión.
En el Senado no se esperan grandes movimientos luego de las elecciones ya que allí el Frente de Todos tiene asegurada la mayoría propia.
El oficialismo pondrá en juego 15 bancas en la Cámara alta mientras que Juntos por el Cambio, 9.
Juntos por el Cambio intentará hacerse fuerte en la Ciudad de Buenos Aires, su histórico bastión, con la precandidatura de María Eugenia Vidal (favorita a ganar la interna contra Ricardo López Murphy y Adolfo Rubinstein), aunque en esta elección aparece como novedad la irrupción del economista liberal Javier Milei, quien amenaza con quedarse con parte del voto de derecha que en otras votaciones acompañaba al PRO.
El Frente de Todos llevará a Leandro Santoro a la cabeza e intentará arrimarse a los 30 puntos para conseguir cuatro bancas, una más que en 2017.
En la provincia de Buenos Aires el Frente de Todos encabeza su lista única con la platense Tolosa Paz, quien intentará superar la sumatoria de los votos que acumulen las dos listas de Juntos: la liderada por Diego Santilli (favorita en la interna opositora) y la de Facundo Manes.
