Política
El hoy tan des-preciado
Argentina (y Mendoza claro está) transitan una era en la que parece no haber forma alguna de encontrar un consenso social, que permita descomprimir la tensión permanente en la que vive el sistema democrático argentino. Las causas que derivan en este panorama de inestabilidad son múltiples, sin embargo, hay una que podría erigirse como determinante: se trata del poco tino para intuir la atmósfera de las demandas sociales, por parte de más de un dirigente político, gobernante o funcionario, cualquiera sea su pertenencia partidaria. Este hecho singular, hace que faltando casi un año para las próximas elecciones, oficialismos y oposiciones inviertan un tiempo denodadamente valioso, en construir candidaturas del futuro, descuidando o desatendiendo las problemáticas de gestión que hoy requieren soluciones urgentes.
Hay excepciones
En la jornada de ayer, Sergio Massa, Ministro de Economía de la Nación, arribó a nuestra provincia con importantes anuncios para el sector productivo. El líder del Frente Renovador, (una de las patas importantes de la mesa que sostiene al Frente de Todos) estuvo acompañado por dirigentes de todas las vertientes de peronismo local; no obstante, dos figuras fueron observadas con atención en la reunión: Martín Hinojosa y Gabriela Lizana, ambos funcionarios del gobierno nacional, que desde hace tiempo caminan la provincia con diversos planes y programas, con la única intención de gestionar la realidad, de ayudar a encontrar soluciones. Como ellos dos, seguramente hay otros tantos que trabajan con pasión por un país y una provincia mejor.
Hinojosa (Presidente del Instituto Nacional de Vitivinicultura) y Lizana (integrante del equipo de José Ignacio de Mendiguren en Producción) han sido destacados hasta por figuras de la oposición, por valores que debieran ser comunes, pero que en estos tiempos no lo son: funcionarios serios y profesionales en las gestiones que cada uno lleva adelante.
Algún apresurado se animó en el acto de ayer a postularles, para competir como candidatos en las próximas elecciones; ambos funcionarios desacreditaron con firmeza el rumor, y dejaron en claro que los ocupa el presente. Consultados, tanto Hinojosa como Lizana, aseguraron tener el enfoque puesto en intentar mejorar la compleja situación “del hoy”, estar abocados completamente a la gestión que les ha sido asignada en el ahora. Para lo otro ya habrá tiempo.
Parece una utopía, pero no lo es, para todos los gobiernos, “el hoy”, debiera ser el objetivo central, resolver los temas que necesitan resolución ahora, es casi torpemente un concepto obvio que muchos pasan por alto. La sociedad (sobre todo aquellos de menores recursos) precisan con premura poder mejorar un poco al menos, su calidad de vida. Para ello se necesitan jugadores en el tablero político que estén a la altura. Está claro en ese derrotero de una carrera electoral, que quizás enfocar en el presente, pueda ser la fórmula ideal, para un futuro esperanzador.
