Microcentro porteño
El centro porteño recuperaba su ritmo habitual luego de la histórica movilización popular que se vivió para saludar a la Selección Argentina recién llegada con la Copa del Mundo, mientras continuaba un operativo de limpieza y mantenimiento en la zona del Obelisco y alrededores. Luego de los festejos, el Obelisco se encontraba con pintadas dentro y fuera del monumento, al tiempo que se registraban daños en las rejas del cerramiento.
Personal de la dirección de Competencias Comunales y Talleres del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires trabajaba en la instalación de nuevas rejas en el perímetro del Obelisco y de dos puertas blindadas, después de que durante los festejos algunos hinchas “arrancaron parcialmente el 50% de lo que es el cerramiento”, indicaron a Télam fuentes del área.
Dado que había riesgo de derrumbe, se retiraron las rejas que quedaron en pie y una cuadrilla estaba soldando los nuevos paños, mientras que esperaban terminar la instalación. También, ya se encontraban reparados los mástiles que se ubican a pocos metros del Obelisco, que habían sufrido el robo de las banderas y daños en las lingas. A su vez, unos 50 operarios se encontraban terminando las tareas de limpieza y barrido de los residuos diseminados en el piso.
A primera hora de la mañana del miércoles quedaban en el suelo solo algunos papelitos de colores y pétalos de rosas. "El operativo de limpieza comenzó el martes a la noche. Los manifestantes se fueron pasadas las 3 de la mañana y alrededor de las 4 empezamos a poder limpiar con comodidad", dijo a Télam Mariano De Vicenzo, supervisor de turno de la empresa AESA que brinda servicios de higiene urbana en la Ciudad.
Además, se encontraba operando un camión cisterna con un tanque de agua de 9.000 litros para realizar las tareas de hidrolavado y quitar la suciedad del piso, al tiempo que con una grúa se reparaban las luminarias.
Entre los daños en la zona, se podía observar el jardín vertical con las formas de las letras BA de 6.5 metros de altura, al que le arrancaron la mayoría de las plantas. En tanto, las esquinas del cruce entre la avenida 9 de Julio y Corrientes permanecían valladas. Empleados del McDonald's ubicado en esa esquina dijeron a Télam que no se reportaron daños en el local y que solo tuvieron que lavar la vereda.
En Plaza de Mayo decenas de operarios también limpiaban el lugar, donde todavía podía verse una gran cantidad de botellas, bolsas y latas de espuma desparramadas por el suelo. El mismo escenario se repetía en las inmediaciones de la Casa Rosada y la Avenida Leandro N. Alem, donde yacían apiladas bolsas de residuos llenas al lado de los tachos de basura.
