Resonante caso
A mediados del 2021, el prestamista Juan Carlos Fracchia, de 61 años, fue asesinado a balazos por un sicario, en su domicilio ubicado en Maipú. En este sentido, el juicio por jurados se realizará en la primera semana de julio y contará con el testimonio de Diego Barrera, condenado por el asesinato de Diego Aliaga.
La Justicia determinó que el debate se realice del 1 al 5 de julio. Gustavo Luis Delgado, de 25 años, y Luis Gabriel Córdoba, de 47, son los sospechosos del crimen. El primero de ellos imputado como el sicario que concretó el homicidio, en tanto que el segundo sería el instigador, quien mandó a ultimar a la víctima fatal. Ambos arriesgan una condena a prisión perpetua.
La hipótesis de la Fiscalía
El juicio buscará esclarecer el móvil del homicidio, ya que el mismo Delgado admitió cometer el crimen, luego de que en el lugar se encontraron una mochila y una gorra que tenían sus rastros genéticos.
Además, la Fiscalía sostiene que Luis Córdoba envió a Delgado porque tenía una deuda de aproximadamente 200 mil pesos con la víctima fatal. Personal policial afirmó que, al detener al presunto asesino, confesó que lo mandó "el mecánico" y que le había prometido "una papa de dinero" por consumar el asesinato.
La hipótesis de la defensa es que Delgado ingresó al domicilio de Fracchia para robarle dinero. En ese sentido declaró durante la investigación Diego Barrera, asesino condenado del aduanero Diego Aliaga y testigo clave en la causa por coimas contra Walter Bento. Barrera declaró que compartió pabellón con Delgado y con Córdoba. El primero de ellos le aportó esa versión del robo. En tanto que el segundo decía que no tenía nada que ver con el asesinato.
Ambos sospechosos podrán ser condenados a prisión perpetua bajo la calificación de homicidio agravado por el pago o promesa remuneratoria y por el uso de arma de fuego.
Cómo ocurrió el crimen
Sucedió el 14 de julio del 2021, cuando una empresa de seguridad recibió la notificación de una alarma sonando un domicilio ubicado en calle Ameghino al 460.
Al no recibir respuesta del propietario, se comunicaron con su pareja. La mujer se dirigió al lugar e ingresó con ayuda de personal policial, donde encontraron a Juan Carlos Fracchia tirado sobre la cama, consciente, pero imposibilitado para moverse y con un disparo en la cabeza.
Fracchia debió ser internado, sin embargo, murió al día siguiente. Los testigos reconstruyeron que el hombre era prestamista, que atendía en una oficina ubicada dentro de su domicilio y que tenía problemas con un mecánico por deuda de dinero y otros asuntos.
Luego, los objetos encontrados allí conectaron el hecho con Delgado y Córdoba.
