Fórmula 1
El piloto de Ferrari, Carlos Sainz, se llevó el premio mayor en el Gran Premio de Australia, destacándose en una carrera plagada de incidentes. Desde el temprano abandono de Max Verstappen, seguido por el de Lewis Hamilton, hasta el incidente de George Russell en la última vuelta que llevó a Mercedes a retirar ambos monoplazas.
Sainz, recientemente recuperado de una operación de apendicitis que lo dejó fuera del GP de Arabia Saudita, mostró una conducción impecable en Melbourne. Se colocó en la delantera desde la segunda vuelta, superando al neerlandés, quien partió desde la pole position. La carrera de Verstappen terminó abruptamente en la cuarta vuelta debido a problemas en el motor, marcando su primer retiro desde el mismo evento en 2022.
El drama continuó en la vuelta 17, cuando el siete veces campeón mundial Lewis Hamilton se vio obligado a abandonar por fallas similares en su motor. Este incidente dejó el camino libre para que Sainz y su compañero de equipo en Ferrari, Charles Leclerc, dominaran la pista.
La carrera culminó bajo un Virtual Safety Car por el accidente de Russell que, de igual forma que su compañero de Mercedes, tuvo que abandonar. Tras muchas sorpresas, Ferrari consiguió su primer 1-2 de la temporada, mientras que Lando Norris de McLaren completó el podio, asegurando el tercer puesto en una actuación sólida.
El equipo Red Bull mantiene su liderazgo en la clasificación gracias a las actuaciones previas de Verstappen y su compañero de equipo Sergio “Checo” Pérez.
