Recurso hídrico
El Departamento General de Irrigación de Mendoza ha divulgado su pronóstico de escurrimiento hídrico para la próxima temporada de riego, arrojando luces sobre la situación actual de los caudales de los ríos en la provincia. Si bien se espera una recuperación en los caudales gracias a las recientes nevadas, persiste la preocupación debido a la pérdida del 20% de los recursos hídricos como consecuencia del cambio climático.
Sergio Marinelli, Superintendente de Irrigación, enfatizó que la mejora en los caudales debido a las nevadas no debe llevar a la relajación en el cuidado del agua y en la inversión en infraestructura. El pronóstico revela que las nevadas han contribuido a revertir en parte la tendencia de reducción en los caudales que se había observado en los últimos años, lo que representa un respiro para la agricultura y la disponibilidad de agua en la provincia.
No obstante, el panorama a largo plazo sigue siendo desafiante, ya que se proyecta una pérdida significativa de recursos hídricos en Mendoza debido al cambio climático. El 20% de disminución en los caudales es un indicador preocupante que requiere de medidas concretas para preservar los recursos hídricos en la región.
Marinelli subrayó la importancia de enfrentar los efectos de la sequía con una conciencia hídrica más sólida, promoviendo cambios en el Código de Aguas, brindando asesoramiento a agricultores y promoviendo obras de eficiencia hídrica. Además, destacó la necesidad de una gestión sostenible del agua para garantizar su disponibilidad a largo plazo y adaptarse a los desafíos climáticos que enfrenta la provincia.
El pronóstico de escurrimiento hídrico plantea una realidad mixta para Mendoza, con un alivio temporal gracias a las nevadas, pero con la advertencia de la persistente amenaza del cambio climático que exige acciones decididas y una planificación estratégica para el futuro en la gestión de los recursos hídricos.
