Lucha Contra el Fuego
Esta media mañana, el fuego en la zona del Piedemonte, que parecía estar bajo control, ha experimentado un reavivamiento, poniendo nuevamente en jaque a las autoridades y equipos de emergencia de Mendoza.
El coordinador del Plan Provincial de Manejo del Fuego, Diego Martí, informó que las llamas se han reactivado en la zona de San Ignacio y San Isidro, con un área afectada que ronda entre las 1.800 y 2.000 hectáreas.
El incendio, que se originó por la caída de un tendido eléctrico, ha sido alimentado por fuertes ráfagas de viento sonda, dificultando las labores de contención. A pesar de la complejidad del terreno, los equipos se encuentran distribuidos en puntos estratégicos, luchando contra el reloj para detener el avance de las llamas.
Impacto y Estrategias
Según Martí, no se ha observado fauna afectada hasta el momento, y las tareas se concentran exclusivamente en combatir el fuego. Sin embargo, Daniel Burriesa, Director de Defensa Civil de la provincia, destacó que la situación ha cambiado drásticamente debido a varios re-encendidos y el aumento en la velocidad del viento.
Las operaciones aéreas han tenido que ser suspendidas, y se está reorganizando a los brigadistas y bomberos para retomar el control de la situación. Aunque se han evacuado varios barrios aledaños a la reserva durante la madrugada, no se reportan víctimas ni personas heridas hasta el momento.
Preservación y Prevención
La cercanía del fuego a áreas protegidas y zonas urbanas aumenta la gravedad de la situación. A tan solo dos kilómetros, existen poblaciones en riesgo, y el fuego ya ha ingresado al perímetro de la Reserva Divisadero. Aunque la flora se ha visto gravemente afectada, el impacto en la fauna es menor. Sin embargo, se anticipa que los daños en el ecosistema llevarán años de trabajo y restauración.
Recordando la Noche Anterior
Durante la noche previa, las autoridades y equipos de emergencia realizaron un esfuerzo titánico para evacuar los barrios en riesgo, trabajando bajo condiciones extremas debido a las altas temperaturas y las llamas descontroladas. A pesar de los avances logrados en las primeras horas de la mañana, el viento ha reavivado algunos focos, recordando a todos la volatilidad de la situación.
Las autoridades instan a la población a mantenerse informada a través de canales oficiales y a seguir las indicaciones de los equipos de emergencia, mientras Mendoza enfrenta uno de sus desafíos más difíciles contra el fuego.
Colaboración
La Provincia ha solicitado colaboración al Plan Nacional de Manejo del Fuego y al Ministerio de Ambiente de la Nación para conseguir un avión hidrante con el objetivo de lanzar agua sobre los focos activos. Los esfuerzos continúan para controlar el fuego lo más rápido posible y proteger a los equipos de trabajos, población civil y al medio ambiente.
