Elecciones
A falta de tres meses para las elecciones presidenciales en Estados Unidos, el voto por correo ha abierto otra brecha entre los Demócratas y los Republicanos.
Debido a la pandemia de coronavirus, se esperan millones de votos por correo. Una situación para la que el servicio postal no está preparado. Advierte que existe la posibilidad de que haya retrasos y como consecuencia, las papeletas no puedan ser procesadas a tiempo.
Ante esta situación, los ciudadanos culpan a su director general el republicano Louis DeJoy, nombrado por el presidente Donald Trump. El director ha adoptado medidas que afectan al servicio, como por ejemplo la suspensión de las horas extras y la congelación de nuevas contrataciones.
La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, ha pedido a los legisladores que voten un proyecto de ley para bloquear las reestructuraciones que tenían planeadas.
Por su parte, Trump ha atacado al servicio postal calificándolo de deficiente. Además, se ha negado a destinar 25.000 millones de dólares que mejorarían sus carencias y ha rechazado crear un fondo extraordinario dedicado exclusivamente a reforzar el servicio para el voto por correo.
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