El Bautista Gargantini fue el escenario del primer encuentro entre Independiente Rivadavia y Godoy Cruz en la Primera División. Como parte de las maniobras preventivas, el Ministerio de Seguridad y Justicia afectó unos 225 efectivos en la cancha con el fin de controlar los accesos.
Por su parte, fuera del estadio se apostaron cerca de 150 policías, que se ubicaron estratégicamente en diversos puntos de las zonas aledañas.
En total, fueron 19 los aprehendidos que quedaron a disposición de la Justicia. Desde la Dirección General de Relaciones con la Comunidad detallaron:
- Nueve de ellos se detuvieron por averiguación de antecedentes, tras algunos incidentes que intentaron provocar en el ingreso y que la Policía contuvo rápidamente.
- Ocho por presentar medidas pendientes en el Programa Tribuna Segura.
- Y dos por provocar disturbios en las inmediaciones (daño al Estado y posible delito por uso de arma de fuego).
Además, cuatro efectivos terminaron lesionados en los procedimientos realizados que permitieron garantizar la seguridad de los asistentes, tanto dentro como fuera de la cancha. Como si fuera poco, dos motos del Grupo Operativo de Capital y una bicicleta de la Unidad Ciclística de Acción Rápida (UCAR) fueron dañadas por los barras.
“A través de las actas que surjan del final del operativo, se va a analizar la situación de los aprehendidos y detenidos para que sean ingresados al programa Tribuna Segura”, informaron desde Relaciones con la Comunidad.