INMINENTE TRASLADO

El tortugo Jorge pasa sus últimos días en Mendoza

Será llevado en los próximos días a un complejo ubicado en Mar del Plata, esa será su próximo habitat de un emblema provincial, su situación por momentos se convirtió en cuestión de estado.

Por momentos el caso Jorge, el tortugo de todos será llevado en días de Mendoza a la costa Argentina.

Si algo nos identificaba a los mendocinos, casi como una cuestión de estado, era saber que será del tortugo que hace más de 40 años llegó a estas tierras, rápidamente se convirtió en el principal atractivo de en aquel entonces acuario municipal de la Ciudad de Mendoza. 

Finalmente, se confirmó que luego de casi 40 años en cautiverio, el tortugo Jorge será trasladado del acuario municipal de la Ciudad de Mendoza (que permanece cerrado), hacia Mar del Plata. El cambio de casa se realizará en los próximos días y será vía aérea.

Ulpiano Suarez - Intendente de la Ciudad de Mendoza

Será el propio intendente, Ulpiano Suarez quien acompañará a Jorge en el vuelo privado cuando se realice el operativo de traslado al centro de rehabilitación del Aquarium, que le dará al tortugo posibilidades de reinsertarse en su hábitat natural.

Jorge, que tiene entre 65 y 72 años, vive en un estanque de 20.000 litros de agua y pesa 99 kilos, será llevado al Centro de Rehabilitación de Fauna Marina (CRFMA) del Aquarium de Mar del Plata, donde tras cumplir una etapa de adaptación en un estanque acondicionado de 120 mil litros, será colocado en una laguna natural de dos hectáreas situada en la misma zona.

AQUARIUM el complejo donde vivirá jorge 


Una vez allí, profesionales de biología marina evaluarán cómo se desenvuelve el tortugo y analizarán si es seguro que el espacio sea compartido por otras especies de agua dulce.

Sebastián Fermani, subsecretario de Ambiente de la Municipalidad de Mendoza, explicó en declaraciones a la prensa local, que "el viaje se realizará en un avión privado que dispuso la comuna para que el riesgo sea mínimo y el animal se colocará en un contenedor con una base de colchón húmedo".

El funcionario explicó además que la provincia de Mendoza seguirá manteniendo la tutela legal sobre el tortugo y serán responsables de seguir el proceso de rehabilitación.

El tortugo Jorge pesa más de 90 kgs y tiene cerca de 75 años

EL REVES JUDICIAL PARA EVITAR EL TRASLADO

El Tribunal Colegiado Primero de la Oficina de Gestión Administrativa Penal (OGAP) emitió un dictamen en respuesta a la acción de habeas corpus presentada en abril por un grupo de abogados ambientalistas en favor del animal.

La jueza María Belén Renna declaró abstracta la acción de habeas corpus presentada, debido a que la puesta en marcha del plan municipal de reconversión del acuario en un centro para la conservación de la biodiversidad y las consecuentes acciones que este contempla con respecto a la tortuga tornaron "estéril el dictado de una sentencia sobre el fondo de la cuestión", consideró la magistrada.

El tribunal basó su dictamen en el análisis de los informes y las declaraciones testimoniales reunidos y la Justicia destacó "la cautela con la que los especialistas recomiendan evaluar un posible traslado" del animal.

En esta misma línea, resaltó que dicha precaución "resulta unánime y avalada en motivos científicos relacionados con la necesidad de asegurar el bienestar y evitar la muerte" del animal.

Desde la municipalidad de la Ciudad de Mendoza difundieron el fallo y aseguraron que ellos no se oponen al traslado a un santuario o centro de conservación de la tortuga macho, en tanto se resguarde la vida y la integridad física del ejemplar.

Entre las interconsultas que concretó el municipio, se encuentra la realizada con el Ecoparque de la Ciudad de Buenos Aires, cuyo establecimiento advirtió sobre las complicaciones asociadas a la liberación del animal en un ecosistema marítimo, indicaron en un comunicado divulgado por la comuna mendocina.

Al respecto, aludieron como a la edad avanzada de la tortuga y las complejidades que acarrea su traslado.

La jueza también resaltó en que el plan municipal de reconversión del acuario no se opone al traslado del ejemplar a hábitat apto que mejore sus condiciones de vida y remarcó que la decisión de relocalizarlo se encuentra "solo supeditada a resguardar la vida e integridad física del animal debido a su avanzada edad".

Ello, en definitiva, "protege su derecho a una vida digna, tal como se solicita" en el habeas corpus, planteó la magistrada.

La tortuga apareció a principios de 1984 en una playa cercana a la ciudad bonaerense de Bahía Blanca, entumecida por el frío y herida, y fue rescatada por pescadores y el Instituto Oceanográfico Argentino, con sede en esa ciudad, que la identificó como de la especie tropical Caretta caretta, común de mares cálidos pero inusual en el Mar Argentino.

Según recordaron desde el municipio, "no se consideró devolverla al mar, dado que la devolución de animales tropicales poiquilotermos (de sangre fría) a medios muy fríos no se aconseja para la especie. Esto es debido a que un descenso en el metabolismo los lleva a la muerte por causas fisiológicas y/o mecánicas, por ejemplo asfixia".

Por esta circunstancia y dado que el Acuario Municipal de Mendoza era el único capaz de recibirla, fue despachada vía aérea a la ciudad en seco, dentro una caja de madera construida especialmente para el animal.

Así, fue recibida el 4 de marzo de 1984, pesando en ese momento 40 kg y, luego de estar en varios recintos, se la trasladó en febrero del 2006 a un estanque de 20.000 litros de aguamarina con 85 kg de peso. Con el tiempo se la llamó Jorge.

Miles de niños crearon un vínculo muy fuerte con el animal