Operativo exitoso
La Policía Federal, con sede en San Rafael, junto a otros organismos federales, llevaron a cabo un allanamiento en una finca ubicada en Real Padre y lograron rescatar a diez hombres mayores de edad. Los mismos se encontraban trabajando bajo un régimen de explotación laboral.
Gracias a una denuncia realizada por uno de los trabajadores, quien logró escapar del lugar en enero, la investigación se puso en marcha con el objetivo de liberar al resto de las víctimas. En su relato, el hombre narró que el encargado de la finca lo había contactado para trabajar en la cosecha de peras y duraznos. Le ofreció una muy buena remuneración económica, por lo que aceptó y viajó a Mendoza desde la provincia de Salta.
Sin embargo, cuando comenzó a trabajar, la realidad cayó por su propio peso: la paga era mucho menor a la pactada y las condiciones habitacionales eran muy precarias.
Operativo de rescate exitoso
Mediante averiguaciones, seguimientos y filmaciones, la brigada de la División Unidad Operativa Federal San Rafael de la Policía Federal determinó que el encargado se dedicaba a contactar personas del norte del país, como Salta y Tucumán, les pagaba el pasaje del colectivo con la promesa de un buen trabajo en la cosecha y que de su sueldo le descontarían el costo de su traslado.
Además, constataron que tenía dos camiones en los cuales, junto a su hermano y padre, trasladaba a los trabajadores a fincas cercanas desde muy temprano y hasta el anochecer, siempre bajo su supervisión.
Así, se ordenó un allanamiento en la finca junto a organismos nacionales especializados: el Programa Nacional de Rescate y Acompañamiento a las Personas Damnificadas por el Delito de Trata; la Delegación local del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la Nación, la Dirección Nacional de Migraciones, la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), y el Registro Nacional de Trabajadores Rurales y Empleadores (RENATRE). Por su parte, personal de Investigaciones de General Alvear llegaron al punto indicado en busca de material que había sido utilizado para amenazar al denunciante.
Condiciones precarias
Tras llegar al lugar, las autoridades descubrieron cómo vivían las víctimas: sus habitaciones no contaban con puertas ni ventanas, y las aberturas del lugar se encontraban cerradas con nylon oscuro, lo que les impedía la vista al exterior. Las camas y colchones se encontraban muy deteriorados y ni siquiera contaban con ducha de agua caliente.
Al inspeccionar los baños, ubicados a varios metros del lugar, advirtieron que habían improvisado sanitarios con postes y nylon, dentro de los cuales habían hecho un pozo que oficiaba de letrina. Otros de los “baños”, estaba cerrado con ladrillos encimados, sin ningún tipo de estabilidad y cuya altura no superaba el metro, también con un pozo tipo letrina.
Por todo esto, se detuvo a uno de los responsables identificados y se secuestró documentación de interés para la causa como: teléfonos celulares, notebooks, fichas que utilizaban para el pago y los dos camiones en los que trasladaban a las víctimas.
