Crisis
El sector automotriz atraviesa una etapa de desaceleración en la venta de vehículos usados en Argentina, reflejando una tendencia que preocupa a vendedores y compradores por igual. La Cámara del Comercio Automotor (CCA) ha revelado cifras que indican una caída significativa en las transacciones de este tipo de vehículos durante los primeros meses del año, evidenciando los desafíos que enfrenta el mercado.
En febrero, se comercializaron 106.228 vehículos usados en todo el país, una cantidad que, si bien puede parecer elevada, señala un descenso respecto a períodos anteriores. Este dato cobra mayor relevancia al considerar el acumulado del año, que muestra una disminución del 9,11% en comparación con el mismo período del año 2023. Este retroceso subraya una tendencia negativa en el sector, que no logra recuperar el impulso previo.
La situación en Mendoza refleja de manera similar este panorama nacional. En la provincia, la baja en la comercialización de autos usados alcanzó el 5.9%, un porcentaje que, aunque menor al promedio nacional, confirma la tendencia descendente en el interés y la capacidad de adquisición de vehículos de segunda mano por parte de los mendocinos.
Varios factores contribuyen a esta situación. La incertidumbre económica, el poder adquisitivo reducido y la fluctuación en los precios de los vehículos son aspectos que los consumidores consideran al momento de decidir sobre la compra de un auto usado. Asimismo, las restricciones crediticias y el aumento en las tasas de interés dificultan aún más el acceso a financiamiento para potenciales compradores.
Desde la CCA y otros sectores involucrados en la industria automotriz, se apunta a la necesidad de adoptar medidas que puedan reactivar el mercado. Estas podrían incluir incentivos para la compra, mejoras en las condiciones de financiamiento y estrategias para aumentar la confianza del consumidor.
