Regreso a casa
Miles de ciudadanos chilenos se encuentran enfrentando extensas esperas en el complejo fronterizo de Los Libertadores, en su intento por regresar a su país tras haber disfrutado del famoso tour de compras en tierras argentinas. Con una espera promedio de aproximadamente dos horas, esta situación ha generado inconvenientes y malestar entre los viajeros.
Durante este fin de semana, se ha observado un notable incremento de vehículos con placas chilenas en supermercados, hipermercados y mayoristas de Mendoza, impulsados por la considerable diferencia cambiaria entre ambas monedas.
Este fenómeno, que ha sido recurrente en los últimos tiempos, se ha convertido en una oportunidad para los visitantes chilenos, que aprovechan los precios más bajos y las ofertas tentadoras del mercado argentino.
El paso fronterizo Cristo Redentor, que conecta a Argentina con Chile, es la principal vía utilizada por los turistas chilenos para acceder a la provincia de Mendoza. Sin embargo, a esta hora de la noche, la espera en el complejo aduanero de Los Libertadores continúa siendo de aproximadamente dos horas, generando una considerable demora en el regreso a su país.
Las autoridades argentinas han informado que están trabajando para agilizar los trámites aduaneros y migratorios, a fin de reducir los tiempos de espera en el complejo fronterizo. Sin embargo, el creciente flujo de viajeros y las medidas de seguridad implementadas han dificultado la rápida circulación de los vehículos.
Por su parte, los turistas chilenos, aunque resignados ante la espera, se muestran satisfechos con los beneficios obtenidos durante su visita a Mendoza. La diferencia cambiaria ha permitido adquirir productos a precios considerablemente más bajos en comparación con los de su país de origen, incentivando así la demanda del tour de compras.
Este fenómeno del turismo de compras ha generado un impacto significativo en la economía de Mendoza, ya que los visitantes chilenos realizan compras masivas en supermercados, hipermercados y mayoristas. Los comerciantes locales han visto aumentar sus ventas de manera considerable y han adaptado su oferta para satisfacer la demanda de estos turistas, creando así un mercado altamente competitivo y atractivo para los compradores chilenos.
