"Como parte un programa integral que tiene la izquierda, esta propuesta establece un impuesto progresivo a los patrimonios a partir de los $100.000.000 (cien millones de pesos). El mismo se aplica a las altas rentas, que incluye a los bancos y a las empresas privadas de todas las esferas de la actividad productiva, de servicios y comercial", explicó el diputado Nicolas Del Caño.
El autor del proyecto, junto a su colega de bloque Romina del Plá, agregó: "Asimismo, se propone gravar la propiedad de la tierra de aquellas personas jurídicas y personas humanas o sociedades indivisas no alcanzadas por el impuesto a los grandes patrimonios que sean propietarias de extensas superficies de tierra de elevada valuación. Se agrega un impuesto progresivo a las viviendas ociosas utilizadas para la especulación inmobiliaria".
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Además, detalló que "el Fondo Especial de Emergencia que se creará con este impuesto es de al menos $ 1.300.000 millones y debe ser utilizado exclusivamente para cuestiones establecidas por la misma ley: dar respuesta inmediata a las necesidades sanitarias y sociales".
En los últimos días se presentaron otros proyectos para gravar las grandes riquezas para que con lo recaudado con ese impuesto se auxilie a distintos sectores de la sociedad afectados por el parate económico, entre ellos uno impulsado por el diputado del Frente de Todos Hugo Yasky.
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