Conmovedora historia
La historia conmovió no sólo a la provincia, sino también al país. Un hombre, oriundo de la ciudad de Famaillá, en Tucumán, buscó a su hija por 15 largos años y, mientras la esperanza jamás desapareció, un día se volvió realidad el reencuentro que tanto había esperado.
El emotivo encuentro fue posible gracias a la intervención de un auxiliar de la Policía de Mendoza, quien encontró a la hija perdida en San Rafael y la ayudó a reunirse nuevamente con su familia.
La protagonista de esta historia es Ana María Polonia, de 34 años, quien reside en el Hogar Divina Providencia de Rama Caída, ubicado en el departamento de San Rafael. La joven desapareció cuando salía de la escuela.
Todo ocurrió cuando, el 26 de septiembre pasado, Ana María salió del hogar y caminó hasta el Parque Mariano Moreno, donde fue encontrada por el policía Alexis Bustamante.
En tanto, su padre Miguel, llevaba ya más de una década buscándola y temiendo lo peor. La buscó en todo el norte del país, y radicó denuncia de paradero en toda esa zona, en Santiago del Estero, Córdoba y hasta en Río Negro, pero nunca en Mendoza, y hasta la Fundación Marita Verón también estaba abocada a la búsqueda.
Algunas de las hipótesis consistían en que Ana María podría haber sido secuestrada para ser explotada sexualmente. Y, en estos casos, las primeras horas desde la desaparición son cruciales. Mientras el tiempo pasa, las posibilidades de encontrar a una persona, al menos con vida, comienzan a desvanecerse. Pero esta es una historia con un final feliz.
Cómo fue el reencuentro entre padre e hija
Alexis Bustamante, auxiliar de la comisaría 38 de San Rafael, relató que cuando encontraron a Ana María, ella no recordaba cómo había llegado a Mendoza ni por qué desde el Hogar donde está alojada hace doce años, las monjas a cargo nunca denunciaron su situación ni ayudaron a la búsqueda de su familia. Gracias a la tecnología biométrica, pudieron identificarla y determinar su verdadera identidad.
Sin embargo, impulsado por la curiosidad que causaba el caso de Ana María, decidió iniciar una búsqueda en Tucumán. Finalmente, con la ayuda de las autoridades y la comunidad local, logró contactar al padre de Ana María, quien viajó a San Rafael en busca de su hija.
El emotivo reencuentro tuvo lugar esta semana y conmovió a todos los presentes. Miguel le contó a su hija que la había buscado incansablemente durante más de 15 años.
La historia tiene otro giro, ya que Ana María tiene dos hijos de padre desconocidos que están bajo custodia, una situación que ahora debe regularizarse y razón por la que se quedó en el hogar. Además, en Tucumán tiene otro hijo que tuvo cuando era muy joven y que vive con su abuela materna.
El policía Bustamante y su familia brindaron un apoyo inquebrantable al padre de Ana María. Incluso lo llevaron en su propio auto hasta la Ciudad de Mendoza para que pudiera tomar un autobús de regreso a Tucumán, después de haber perdido su transporte.
Miguel expresó su alivio y gratitud, afirmando que ahora sabe que su hija está viva, sana y cuidada. Agradeció especialmente al policía Alexis, cuyo arduo trabajo y determinación hicieron posible este emotivo reencuentro después de años de búsqueda.
Esta historia es un conmovedor ejemplo que pone en valor la vital importancia de la perseverancia y la solidaridad en la búsqueda de los seres queridos.
