DISPUTA FAMILIAR
Una pelea que inició hace varios años, demandó varias citas en los Tribunales de Mendoza y dos hermanos enfrentados por la herencia del padre. La disputa entre María Cristina Zuccardi de Flamarique y José Zuccardi llegó a la Suprema Corte de Justicia, en medio de un complejo juicio civil.
El caso comenzó con el objetivo de determinar el destino de la herencia que dejó el padre de ambos, Alberto Zuccardi, y que incluye acciones en diversas empresas, como La Agrícola SA. Cristina Zuccardi fue quien empezó la demanda contra su hermano en el fuero Civil y Comercial.
Cómo inició la pelea por la herencia
Los hermanos no tienen relación alguna desde hace algunos años y, en este marco, el caso que los enfrenta ya tuvo dos fallos adversos a lo deseado por Cristina Zuccardi.
A principios de marzo del 2022, hubo una sentencia de primera instancia en el Tercer Juzgado Civil y Comercial, en donde la demandante fue desfavorecida. Luego, decidió apelar a la instancia superior.
Tiempo después, precisamente en julio de este año, la Segunda Cámara de Apelaciones en lo Civil y Comercial rechazó el recurso de apelación interpuesto. De esta forma, y con las opciones agotadas, se procedió a llevar el caso a la Suprema Corte de Justicia.
Qué está en juego para los hermanos
El juicio Civil abarca una demanda comprensiva de las acciones de reducción, simulación, fraude y nulidad de las resoluciones asamblearias, que fue interpuesta por Cristina Zuccardi contra José Alberto Zuccardi, María Julia Zuccardi y La Agrícola SA.
La acción de reducción es por la donación de acciones de La Agrícola SA efectuada por Alberto Victorio Zuccardi, padre de los Zuccardi, a su hijo Pepe y a su nieta María Julia Zuccardi. Representan el 13.33% de participación.
Cristina Zuccardi considera que fue afectada su porción legítima y solicitó que "sean restituidas en especie, previa nulidad y reintegro al capital de la empresa nombrada, de todos los bienes que los demandados hubieran dispuesto como administradores de dicha sociedad o hubieran adquirido como consecuencia del ejercicio de derechos, utilidades, reservas, retiros, reinversiones o dineros de la sociedad que pudieran hallarse a nombre de terceros, incluyendo las marcas transferidas de la sociedad a favor de los demandados, desde la fecha de las donaciones que deben reducirse y hasta la fecha de entrega de las acciones".
Por su parte, la acción de simulación y fraude que presentó intenta demostrar que "bajo la apariencia de contratos onerosos o maniobras societarias, se ocultaron operaciones gratuitas, leoninas o concertadas para mejorar al demandado José Alberto Zuccardi, en el porcentaje remanente y no donado en la partición por donación del ascendiente, de modo que se restituya a su representado el 1.67% del porcentaje accionario que debió permanecer en cabeza del causante, incluido en la acción de reducción".
En última instancia, la acción de nulidad contra La Agrícola SA apunta "a que se declare la nulidad de las resoluciones sociales adoptadas en las reuniones de directorios y las Asambleas Generales de Accionistas de la nombrada sociedad con posterioridad al 23/03/92".
