Bienestar
No sólo el ejercicio físico intenso —como trotar, montar en bicicleta o nadar— sino también simplemente visitar diferentes lugares parece estar asociado con un mejor sentido de bienestar en personas con depresión o ansiedad, de acuerdo con lo descubierto por un estudio publicado en 2022 por investigadores de la Universidad de Psiquiatría de Clínicas en Basel, Suiza.
Para el estudio, 106 pacientes con diversos trastornos mentales, incluyendo trastornos afectivos, de ansiedad, del estado de ánimo, de personalidad y trastornos obsesivo-compulsivos, llevaron consigo un teléfono extra durante una semana para rastrear sus movimientos mediante GPS. A través de encuestas, los pacientes también proporcionaron información sobre su bienestar subjetivo, su flexibilidad psicológica y los síntomas de sus enfermedades mentales.
Los autores del estudio encontraron que un mayor movimiento en el espacio y en el tiempo parecía coincidir con un mayor sentido de bienestar, a pesar de que los síntomas de las enfermedades mentales seguían estando presentes. Los pacientes que eran tratados en régimen ambulatorio mostraron un movimiento considerablemente mayor que los pacientes internados, aunque estos últimos pasaban la mayoría de su tiempo dentro del hospital.
"Nuestros resultados sugieren que la actividad por sí sola no es suficiente para reducir los síntomas de los trastornos mentales, pero puede mejorar al menos el bienestar subjetivo", explicó el psicólogo de salud y clínico Andrew Gloster, de la Universidad de Basel.
El estudio es uno de los primeros en utilizar el rastreo GPS como medida del movimiento espontáneo y se suma a un cuerpo limitado de investigaciones sobre los efectos de las actividades cotidianas entre las personas con problemas de salud mental.
Aunque aún no está claro cómo el movimiento espontáneo en la vida diaria afecta a los pacientes que buscan tratamiento para la salud mental, las actividades cotidianas sencillas, como caminar hasta la parada del tranvía o subir una escalera, podrían ser un buen punto de partida.
Finalmente, el estudio sugiere que el movimiento puede ser un indicador de cómo los pacientes con problemas de salud mental están manejando su situación en general. "Los resultados apuntan al hecho de que los patrones de movimiento pueden servir como un indicador de funcionamiento y bienestar", concluyeron los autores.
