La situación es típica: recibimos una invitación a comer con algunos amigos y nos piden que llevemos “algo dulce”. Nunca sabemos qué preparar y no queremos caer en lo típico. Si todo esto te resulta familiar, esta receta es para ti: un crumble de manzana que te llevará muy pocos minutos preparar y que, te garantizamos, le gustará a todo el mundo.
Con tan solo cinco ingredientes y cuatro simples pasos, tendrás un crumble de manzana que fascinará a grandes y chicos. Te aseguramos que esta fantástica receta se convertirá muy pronto en tu caballito de batalla al momento de preparar un postre.
Ingredientes
- 5 manzanas verdes grandes
- 200 gr. de harina 0000
- 200 gr. de azúcar
- 100 gr. de mantequilla
- Canela en polvo c/n
Procedimiento
- Pelamos las manzanas y las trozamos en cubos pequeños (de ½ a 1 cm. según tu gusto).
- En un bowl, colocamos la harina, la mantequilla troceada (y fría) y ¾ partes del azúcar, luego, revolvemos muy bien utilizando las manos para formar la textura típica del crumble: trocitos bien separados, como si fueran piedrecillas blancas. Dejamos enfriar en el refrigerador por 20 minutos.
- En una fuente, preferentemente rectangular, colocamos las manzanas troceadas en una capa uniforme y espolvoreamos con el resto del azúcar y la cantidad que nos guste de canela. Luego, vertemos la mezcla de harina, azúcar y mantequilla sobre las manzanas.
- Finalmente, en un horno precalentado a 160°, colocamos la bandeja durante unos 30 minutos, aproximadamente (la superficie debe estar ligeramente dorada).
Ya puedes disfrutar de tu crumble de manzana. Lo típico es comerlo frío o tibio acompañado de helado de crema o de vainilla.