Un hecho reciente despertó la conmoción en Guaymallén, tras un llamado al 911 que alertó a las autoridades sobre “olores fuertes” que provenían de una casa ubicada en calle Las Cañas 66, de Dorrego. Cuando personal policial arribó al lugar indicado, encontraron el cadáver de un hombre que había sido parcialmente devorado por perros.
De acuerdo a las autoridades, se trataba de un hombre de entre 60 y 70 años, del cual “sólo quedaban huesos y una remera” por el accionar de los canes.
En las averiguaciones, descubrieron que la víctima no tenía contacto con su familia desde hacía mucho tiempo. En tanto, los vecinos revelaron que vivía con varios perros y que “nunca molestaba a nadie”.