La salsa bechamel es una maravilla de la cocina clásica. Con su textura suave y sabor delicado, esta salsa blanca es un verdadero comodín en la cocina. Perfecta para pastas y carnes, la bechamel puede convertir un plato ordinario en una experiencia gastronómica extraordinaria. Su versatilidad y facilidad de preparación la hacen indispensable en cualquier recetario. ¡Aprende a prepararla y descubre cómo puede realzar tus platos favoritos!
Ingredientes
- 50 g de mantequilla
- 50 g de harina de trigo
- 500 ml de leche
- Una pizca de nuez moscada
- Una hoja de laurel
- Sal y pimienta al gusto
Procedimiento
- Derrite la mantequilla en una sartén a fuego medio.
- Añade la harina y remueve durante un minuto.
- Vierte la leche gradualmente, sin dejar de remover.
- Agrega la nuez moscada y la hoja de laurel.
- Cocina a fuego lento hasta que espese, removiendo constantemente.
- Sazona con sal y pimienta.
- Retira la hoja de laurel antes de servir.
La salsa bechamel es una auténtica artista en la cocina. Su textura cremosa y sabor suave la hacen ideal para acompañar una variedad de platos. Ya sea cubriendo una lasaña, añadiendo cremosidad a un plato de pasta, o sirviendo como base para una salsa de carne, la bechamel siempre brilla. Es ese toque secreto que hace que tus platos pasen de buenos a excepcionales. ¡Intégrala en tus recetas y sorprende a todos con tu habilidad culinaria!